Discriminación y acoso
Valoramos la diversidad y la inclusión como parte de un entorno de trabajo inspirador
Roche siempre ha estado abierta a enfoques nuevos y diferentes, al operar en numerosos países con muchas culturas diferentes. La diversidad requiere un liderazgo cuidadoso para evitar malentendidos y conflictos y para aprovechar plenamente el valor de la diversidad. En Roche valoramos y gestionamos la diversidad a través de un entorno inclusivo, porque estamos convencidos de que es algo esencial para impulsar la innovación y fomentar el compromiso y la dedicación de los empleados. La variedad de orígenes, culturas, idiomas, planteamientos e ideas de nuestra gente nos ayuda a mantener una ventaja competitiva.
Somos muchos y trabajamos unidos en muchas funciones, en muchas empresas y en todo el mundo. La cultura de inclusión de Roche significa que valoramos las diferencias entre nuestros empleados y trabajamos activamente para crear un entorno en el que todos tengamos la posibilidad de intercambiar nuevas ideas y nuevos modos de trabajar y podamos desplegar todo nuestro potencial.
Roche está comprometida con un trato igual y justo a todos los empleados y a todas las personas que aspiran a trabajar en Roche. Esto incluye la igualdad de oportunidades para el desarrollo y la promoción profesional. No toleraremos ninguna forma de discriminación ni acoso en el lugar de trabajo.
No se tolerarán en el lugar del trabajo conductas ofensivas, abusivas o en general indeseables hacia un empleado, que vulneren la dignidad personal de la víctima o creen un entorno intimidatorio, hostil o humillante para ella (por ejemplo, el acoso físico, sexual, psicológico, verbal o de cualquier otro tipo). Roche tiene como política garantizar que el comportamiento de sus empleados no discrimine a nadie por motivos de sexo, edad, etnia, origen, religión, discapacidad, orientación sexual, infección por VIH/SIDA, nacionalidad, características genéticas, capacidades ni ninguna otra categoría protegida por la legislación.
Estos principios se aplican a todos los aspectos de la relación laboral, tales como la contratación, la asignación de tareas y destinos, la promoción, la remuneración, las medidas disciplinarias y la terminación del contrato.
Si creemos que alguien ha sido objeto de discriminación o acoso, debemos notificarlo.